SABOREA TU VIDA
Con amabilidad y conciencia
PROGRAMA SABOREA TU VIDA
El Programa “Saborea tu vida”, es un completo método basado en el Mindful Eating o Alimentación Consciente (NO ES UN MÉTODO PARA PERDER PESO A CORTO PLAZO), que te ayuda a reconectar con tus necesidades físicas y emocionales. Te ofrezco un proceso estructurado para comenzar a tomar las riendas de tu vida y dejar de luchar con la comida, con tu cuerpo, con tus pensamientos y con tus emociones. De este modo, conseguirás saborear tu vida sin dietas restrictivas, sin reglas externas que no tienen en cuenta tus necesidades reales. Y todo ello, teniendo muy presente que lo que quieres es aprender a cuidarte desde la amabilidad, la responsabilidad y en coherencia con tus valores.
DEJAR LA LUCHA Y ABRAZAR TU ESENCIA. REENCONTRARTE Y ABRAZARTE.
¿A qué te ayudaré con el Programa “Saborea tu vida”?
Salir del piloto automático y tomar conciencia de tu presente (Atención plena// Meditaciones).
Atender a tus necesidades reales (físicas y emocionales), adquiriendo intención y responsabilidad en tus elecciones.
Aprender a eliminar la mentalidad dieta rígida y adquirir información nutricional práctica, útil y basada en evidencias científicas (no dietas milagro///más flexibilidad responsable).
Generar hábitos coherentes con lo que quieres en tu vida, eliminando aquellos que te alejan de tu propósito.
Reconocer tus señales de Hambre, Plenitud, Saciedad y Satisfacción.
Conocer los diferentes tipos de hambre.
Reconciliarte y gestionar tu hambre emocional.
Reconocer tus pensamientos en torno a la comida y a ti misma.
Alimentar tu voz compasiva frente a la crítica excesiva, trabajando la responsabilidad frente a la culpabilidad.
GESTIÓN EMOCIONAL.
PASOS DEL PROGRAMA
1 Toma conciencia, sal del piloto automático y suelta la mentalidad dieta.
Sentaremos las bases del proceso, aprendiendo la importancia de ser más conscientes de nuestras sensaciones físicas, nuestros pensamientos, emociones y decisiones. Tomar conciencia de tus hábitos, patrones de alimentación y de tus creencias, serán parte fundamental para un cambio duradero y efectivo en tu estilo de vida.
Y salir del paradigma dieta que impone unas reglas externas será pieza clave para comenzar a conectar con tus necesidades reales.
2 Adquiere información nutricional y pautas específicas basada en evidencias científicas e investigación y no en “dietas milagro” y mitos nutricionales.
Veremos las características de una dieta equilibrada y saludable, trabajando diferentes hábitos que te ayudarán a conseguir tu propósito de cambio (compra saludable, planificación, etiquetado nutricional, comer despacio, la importancia de evitar distractores, horario de ingesta personal, actividad física...)
3 Conoce los siete tipos de hambre
Tener conciencia de los diferentes tipos de hambre, te permitirá alimentarlas adecuadamente y tener presente que no siempre se alimentan con comida. Lo interesante es que todas ellas estén en armonía y las atiendas de un modo efectivo.
4 Identifica tu hambre emocional y aprende a gestionarla desde la amabilidad
Sin darnos cuenta, muchas veces comemos empujados por diferentes emociones (ansiedad, tristeza, aburrimiento, soledad, enfado...). Tomar conciencia de ello, te ayudará a parar, responder y poner intencionalidad en tus decisiones.
5 Reconoce tus señales de plenitud, saciedad y satisfacción
Son conceptos diferentes y muy importantes en nuestra relación con la comida. Reconocer estas señales será muy útil para aprender a escuchar a tu cuerpo y a sentirte satisfecho con lo que haces. Reconocer estas señales te ayudarán a tomar mejores elecciones en cuanto a qué comer, cuánto y cuando comer, cómo comer, para qué comer…
6 Reconoce tus pensamientos y emociones en torno a la comida y a ti mismo
Ser consciente de tus creencias, pensamientos y emociones en relación a tu alimentación, a tu cuerpo, a cómo te hablas y tratas será otra de las claves para empezar a conectar con tus valores y con lo que realmente necesitas.
7 Aprende a ser más compasiva
Aprenderás a alimentar tu voz compasiva para comenzar a tratarte con más amabilidad y responsabilidad frente a la autocrítica excesiva y la culpabilidad.